Qué es la alimentación cetogénica o keto?

Si bien puede parecer compleja, y si bien es cierto que requiere estudiarla y entender cómo funciona, una vez que se clarifican los conceptos principales vas a ver que este tipo de alimentación es mucho más simple de lo que suponemos al principio.

La alimentación cetogénica o keto se basa en una distribución de porcentajes de grupos de nutrientes distintos a los que estamos acostumbrados. Para armar un estilo de alimentación de este tipo, las proporciones son las siguientes:

  • 70% de grasas
  • 25% de proteínas
  • 5% de carbohidratos

Obviamente, hay distintas formas de llevar adelante esta alimentación. En general se habla de una dieta keto «limpia» y una dieta keto «sucia». A mi no me gusta en lo más mínimo esta terminología. Prefiero pensar que podemos seguir una alimentación cetogénica saludable y que podemos reservar el consumo de los alimentos considerados no tan saludables para ocasiones especiales.

Ningún sistema de alimentación basado en la prohibición total o la abstinencia total funciona, ahí es donde entran a jugar las variables psicológicas, en especial las emocionales, que van a dar como resultado poder mantenernos o no en un proyecto de cambio alimentario.

Entonces, teniendo en cuenta esta distinción, hablemos de las grasas.

Las grasas tienen muy mala prensa. De hecho, para vendernos los alimentos saludables, nos dicen en general que son «desgrasados» o «desnatados». Lo que no nos cuenta la industria alimentaria es que esos alimentos bajos en grasa son aditivados con almidones para espesar la consistencia. Y lo que tampoco te explican es que el almidón es metabolizado en tu organismo como un azúcar. Entonces, podés estar comiendo un alimento bajo en grasas e incluso bajo en calorías pero que va a generar un impacto negativo en función de su carga glucémica y de su índice glucémico (Si querés una explicación bastante sencilla de qué se trata cada uno de estos términos, podés HACER CLICK PARA AMPLIAR)

El tema es que las grasas naturales no contienen, en general, carbohidratos. Por lo tanto, no van a provocar ese tipo de impacto en tu organismo, ni van a desencadenar todas las reacciones hormonales que produce la glucosa en tu torrente sanguíneo. Por lo tanto, no vas a tener subidones de glucosa y descensos abruptos de la misma. Para ponerte un ejemplo de este mecanismo: Si comés un plato de pastas y no quemás toda la energía que puede generar la alta cantidad de glucosa que contiene (las harinas se metabolizan como azúcar en tu cuerpo) lo que va a ocurrir es que vas a tener un pico de glucosa y a posteriori una caída abrupta de la misma. Eso se traduce en que al rato te vas a sentir cansado o débil… y lo vas a asociar con hambre, y vas a volver a comer, y en general, vas a vovler a comer una dosis alta de carbohidratos, repitiendo el ciclo…

Por grasas (y en otro posteo vamos a profundizar en los distintos tipos de grasas que hay) nos referimos a:

  • aceites: te voy a recomendar que utilices aceite de coco o aceite de oliva
  • aceitunas
  • paltas
  • nueces / almendras
  • quesos: en general los más duros
  • crema entera (prestando atención a que es un alimento altamente calórico por lo tanto su consumo debe ser moderado)
  • manteca o ghee (manteca clarificada

Estos son algunos ejemplos. Obviamente hay muchas más grasas, como las que contienen algunos aderezos (mayonesas, mostazas, etc) también bajos en carbohidrato, pero que para consumirlos hay que entrar a hilar mucho más fino si queremos considerarlos saludables. Por ende, los vamos a dejar para más adelante teniendo en cuenta que el objetivo de estos primeros posteos es acercarte información mucho más general.

En cuanto a las proteínas, es más simple todavía, ya que vas a tener que buscarlas en:

  • carnes rojas (yo las consumo una o dos veces por semana máximo)
  • carnes blancas
  • pescados
  • mariscos
  • huevos

Antes se creía que no era conveniente comer más de 3 huevos a la semana, afortunadamente hasta los nutricionistas más tradicionales están reviendo la bibliografía y ya aceptan que el consumo de huevos es muchísimo más amplio que ese número. En mi caso suelo consumir entre 6 a 8 huevos al día.

Finalmente, en el 5% que corresponde a los carbohidratos, podemos dejar todos aquellos que no provienen del reino de los cereales y concentrarnos en los vegetales. Y dentro de los vegetales (también voy a dedicar un posteo específico a este tema más adelante) por hoy te voy a recomendar los siguientes:

  • Regla general: todos los que crecen bajo la tierra, no los consumas (papas, batatas, zanahoria, cebolla, nabo, etc)
  • Los vegetales verdes, en general, tienen menos carbohidratos que el resto. Por ejemplo: 100 gr de lechuga contiene 2 gr de carbohidratos, 100 gr de espinaca contiene 1 gr de carbos, etc
  • Vegetales que no superan los 4 gr de carbos cada 100 gr berenjena, tomate, aceitunas, paltas, pimientos (el amarillo tiene 5 gr de carbos, cuidado), coles de bruselas, pepino, zuchini, coliflor, repollo, brócoli.

Por lo tanto, si hoy quisieras armarte un plato keto, podrías comer una pechuga de pollo con una ensalada bien abundante, sumarle media palta, condimentar con aceite de oliva, aceitunas e incluso una mayonesa casera y tendrías un plato que no superaría los 5 a 10 gr de carbohidratos y seguro no pasarías hambre.

Hasta acá llegamos por hoy. Pero esto, continuará

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